Reflexión 9 de Marzo

Buenos días 
Sabemos que el Viernes es el DIA PENITENCIAL por excelencia, siendo los Viernes de Cuaresma especialmente marcados por este ESPÍRITU de PENITENCIA.
Aparte de la Abstinencia de comer carne, que obliga en este día, encontramos una antigua tradición que lleva a los cristianos a rememorar el CAMINO que el Señor Jesucristo recorrió hasta el CALVARIO, después de haber sido AZOTADO sin escrúpulos y sin misericordia alguna, así  como haberle colocado en la cabeza una CORONA de ESPINAS, que más bien se le podría llamar un CASQUETE de espinas punzantes.
Estamos hablando del SANTO VIA CRUCIS, que desde los primeros tiempos de la Iglesia aparece en la práctica devocional de los cristianos.
Al comienzo acudían en peregrinación a los Santos Lugares para andar el camino que siguió el Señor hasta el CALVARIO, incluso cuenta la TRADICIÓN que la VIRGEN MARÍA gustaba hacer el mismo camino que 
su Hijo Jesucristo hizo con la CRUZ a cuestas.
Al comienzo hacían un número indeterminado de Estaciones, hasta que a finales del siglo XVII se fijaron el número de las Estaciones (14), y sus lugares y hechos de meditación y contemplación.
Esta DEVOCIÓN DEL SANTO VÍA CRUCIS fue muy querida y practicada por muchos SANTOS que tuvieron en su espitualidad un gran AMOR a la CRUZ.
Si bien es muy importante hacer este Ejercicio de Piedad, particularmente los Viernes de Cuaresma, no deja de ser muy significativo para la vida espiritual en el resto de los Viernes del Año.
Incluso hay personas que lo hacen cada día.
Personalmente conozco de muchos Conventos de Clausura en los que, para la mayoría de las Monjas, es una muy querida devoción diaria.
Os invito a practicar este ÍNTIMO ENCUENTRO con el SEÑOR JESUCRISTO en los momentos supremos de su Jornada Terrenal, acompañándole en la consumación de su OBRA REDENTORA.
Y con la generosidad fraterna que tienes para con tus Hermanos de la Casa de la Madre y Guia, haz tu oración por sus necesidades. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI