Reflexión 29 de Noviembre

Buenos días 
En la vida de un Católico, digno de tal nombre, es muy importante tener viva la DEVOCIÓN y DEPENDENCIA al ESPÍRITU SANTO.
Como veíamos ayer en el Evangelio de San Juan, el ESPÍRITU SANTO se nos ha enviado para ayudarnos a seguir e imitar las HUELLAS del SEÑOR JESUCRISTO durante su paso por la tierra.
Lo importante es que no olvidemos la presencia del ESPÍRITU SANTO en nuestras vidas, recibido en plenitud a través de los Sacramentos del BAUTISMO primero, y de la CONFIRMACIÓN después. Y cuando por el pecado mortal perdemos la GRACIA SANTIFICANTE, somos restaurados en el mismo ESPÍRITU SANTO por el Sacramento de la CONFESIÓN. 
La otra cuestión, muy importante también, es fomentar la UNIÓN con el ESPIRITU SANTO a través de la invocación asidua cada día: ¡VEN ESPIRITU SANTO, LLENA LOS CORAZONES DE TUS FIELES Y ENCIENDE EN ELLOS EL FUEGO DE TU AMOR. ENVÍA TU ESPÍRITU Y TODO SERÁ CREADO.....!
O cualquier otra que se quiera hacer.
Quiero señalar también que hoy celebramos la Fiesta del BEATO BERNARDO FRANCISCO DE HOYOS, que como sabréis fue uno de los Heraldos que el Señor Jesucristo escogió para extender la devoción al SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS.
A éste joven sacerdote Jesuita, que murió a los 24 años, el Señor le encomendó la propagación de la devocion a su SAGRADO CORAZÓN, particularmente en España, pues habia nacido en Torrelobaton (Valladolid) el 21 de agosto de 1711, muriendo en Valladolid el 29 de noviembre de 1735.
Hoy pedimos su intercesión por todas las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía, al tiempo de pedirle también que nos alcance la GRACIA DE AMAR sin medida al SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS. AMÉN.
Emilio Castrillón 
MATER CHRISTI