Reflexión 13 de Noviembre

Buenos días:
Seguimos con nuestra meditacion sobre la PROFESIÓN DE FE.
"... descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos"
Acaecida la Muerte de Jesús, confesamos "que descendió a los infiernos".
Cuando el Señor muere su alma se separa del cuerpo, como ocurre en cualquier difunto, y desciende al lugar de los muertos, llamado también "sheol" o "hades".
El término "los infiernos" se refiere al lugar donde las almas de los nuertos anteriores a Él estaban esperando la SALVACION. En la Parábola del 'Pobre Lázaro' se le llama "el seno de Abraham"
Jesucristo antes de Resucitar ha de liberar a las almas que estan retenidas a la espera de la Redención, o lo que es lo mismo, a la espera de la llegada a ellos del Redentor, que ha de llevarlos al Cielo con Él, para presentarlos a su Padre Dios.
El Evangelio de San Juan en el capítulo 20 nos cuenta el encuentro del Señor con María Magdalena cuando fue al sepulcro y lo encontró vacío. "Mujer, ¿por qué lloras?", le pregunta el Señor.
Ella no le reconocía hasta que la dice "María", entonces, ante la reacción de ella, Jesús le dice: "No me retengas que todavía no he subido al Padre", indicándole que vaya a sus Hermanos para que les anuncie que le ha visto y que le esperen en Jerusalén.
Este momento está situado en la inmediatez de la liberación realizada en el "seno de Abraham" y la Resurrección manifestada definitivamente a los Apóstoles, una vez había completado su misión con los muertos que esperaban la Venida del Mesías prometido y de subida al Cielos con ellos.
Es, sin duda, una VERDAD de nuestra FE, definida en el IV Concilio Lateranense, muy interesante para la meditación y la profundización en su conocimiento.
El Catecismo de la Iglesia Católica nos habla en los puntos 632 y siguientes de este Artículo de la Fe.
También encontramos referencias en las revelaciones recibidas por la Beata Ana Catalina Emmerick y por la mística María Valtorta.
CONTEMPLAR A CRISTO REDENTOR  en toda su proyección histórica, es algo ciertamente más que muy interesante.
Una vez más os digo, te digo: DEJATE AMAR POR CRISTO, y verás la Salvación ya en tu vida mortal.
Que Él redima todas las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía; esta sea hoy nuestra oración comunitaria. AMÉN.
Emilio Castrillón 
MATER CHRISTI