Reflexión 9 de Junio

Buenos días.
Pasado mañana celebraremos la Solemnidad de la SANTÍSIMA TRINIDAD, ocasión muy propicia para reflexionar en este MISTERIO de nuestra FE, sin duda el más importante. 
Nuestra Fe Católica profesa que hay un solo Dios verdadero y Tres Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
En el catecismo de la infancia de la mayoría de nosotros, se decía:
"El Padre es Dios, el Hijo es Dios y el Espíritu Santo es Dios. Tres Personas distintas y un solo Dios verdadero".
Y en la Historia de la Salvación se puede ir viendo cómo, desde la intervención de Dios Padre en la Creación del mundo, hasta la Encarnación de Dios Hijo y el envío de Dios Espíritu Santo en Pentecostés, se fueron manifestando la identidad genuina de cada una de las Tres Personas de la Santísima Trinidad, que nosotros hoy conocemos perfectamente, y con las que nos podemos relacionar tanto en la intimidad espiritual como en la Celebración Comunitaria de la FE.
Podremos tener la limitación intelectual para comprender y explicar la UNIDAD de Tres Personas distintas en una realidad UNA y ÚNICA como un solo Dios verdadero que son, pero, como indicamos más arriba,  podemos mantener una relación también una y única con Dios, y a la vez con cada una de las Tres Personas. 
Y de esto es de lo que se debe tratar ante la Celebración de la Solemnidad de la Santísima Trinidad.
Os invito a reflexionar para llegar al Domingo a vivir con toda la Iglesia la Gran Fiesta de la SANTÍSIMA TRINIDAD.
Y hoy pidamos por la necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía, a la Trinidad Santa: Gloria al Padre, Gloria al Hijo, Gloria al Espíritu Santo. AMÉN.