Reflexión 5 de Abril

Buenos días Hermanos, hoy vamos a enfrentarnos al pecado capital más grave y más peligroso de los siete. Como ya suponéis, me estoy refiriendo a la SOBERBIA.
Digo que es el más grave y peligroso, porque es el origen y causa de muchos otros pecados que se derivan de su práctica.
Además de llevar a la persona a unas actitudes de altivez, arrogancia, vanidad, etc., que le hará insoportable e irreconciliable para la convivencia.
La SOBERBIA lleva a imponer por la fuerza, y hasta con violencia si fuera necesario, la propia voluntad, con exigencias que no siempre se pueden aceptar de ninguna de las maneras. 
Desde 'el Pecado Original', hay una inclinación en el hombre a ser más que nadie, e incluso, ser más que Dios, y ahí sí que ya el error es tan grande, que la persona pierde todo sentido de la realidad.
La persona debe tener perfectamente identificado lo que se llama "el sentido de la medida", pues cuando le falla este principio, será capaz de llegar muy lejos en sus pretensiones, que serán egoístas cuando menos.
Tocados como estamos todos por el Pecado Original, hemos de VIGILAR mucho para evitar cualquier reminiscencia que se nos manifieste con el signo de la SOBERBIA, o cualquiera de sus hermanos pequeños, para poder evitar males mayores.
Mucho podríamos seguir comentando de la SOBERBIA, pero yo lo dejo aquí para que lo completéis como mejor os parezca en el servicio a los Hermanos.
Sigamos rezando con Fe y Humildad por las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía. AMÉN.
Feliz día.