Reflexión 27 de Abril

Buenos días. 
El quinto mandamiento: NO MATARÁS, plantea varios matices que se deben tener en cuenta. 
Es muy común escuchar a las personas cuando se les invita a ir a la confesión que digan: "no tengo pecados, no robo ni mato..."; pero está claro que este quinto mandamiento no sólo se refiere a lo que es estrictamente 'matar', quitar la vida, tiene otras variables muy significativas.
En el orden personal, obliga a cada uno a velar por su propia vida, y cuidar su salud con seriedad y responsabilidad. Cuando no lo hace así incurre en falta o pecado contra este Mandamiento, porque de alguna manera estará deteriorando su vida y exponiéndola, cuando menos, a una 'muerte parcial', y con el tiempo..., Dios sabrá!
En otra variable está lo que supone hacer serio daño a otra persona, robándole la fama, creando sobre su persona el descrédito, el desprestigio, etc., que de alguna forma "mata", porque puede ser también un atentado grave a su persona por la  difamación, la murmuración, etc.
En definitiva, todos bien debemos hacer un examen serio de los propios sentimientos y comportamientos, con los demás y consigo mismo. 
Resulta triste ver la frivolidad que se vive en el mundo, cuando tienes la ocasión como yo en estos días, de constatar por dentro la seriedad y la responsabilidad con la que se toman la vida estas mujeres dentro del Claustro.
Qué contraste!!!
Por eso os animo, me animo a mí mismo, ha mirar hacia Dios con la mayor rectitud de intención y sinceridad de corazón que seamos capaces.
Hermanos de la Casa de la Madre y Guía, no dejemos a los Hermanos sin nuestra oración intercesora por sus necesidades. AMÉN.