Reflexión 20 de Abril

JUEVES DE LA OCTAVA DE PASCUA 
Hermanos de la Casa de la Madre y Guía, buenos días. 
El próximo Domingo la Iglesia Celebra la Fiesta de la Divina Misericordia, tal como el Señor Jesús se lo pidiera a Santa Faustina Kowalska el 22 de febrero de 1931: "Deseo que haya una Fiesta de la Misericordia (...) el primer domingo después de la Pascua de Resurrección; ese domingo debe ser la Fiesta de la Misericordia" (Diario 49)
Es un día muy importante para que no se nos pase por alto, tanto para beneficio propio como para toda la humanidad. Razón por la que debemos ya irnos preparando y poder alcanzar de Dios todas las Gracias prometidas y ofrecidas.
24 de septiembre de 1936, le dirá el Señor a Santa Faustina: "Deseo que la Fiesta de la Misericordia sea refugio y amparo para todas las almas y, especialmente, para los pobres pecadores" (Diario 699)
Tanto para los que conocéis como para los que no conocéis de estos deseos del Señor Jesucristo en su Divina Misericordia, quiero deciros estas cosas para que todos NOS PREPAREMOS en la Meditación de las palabras de Jesucristo, y aprovechemos de tanto AMOR y de tanta GRACIA como se nos ofrece.
Acabo con otras palabras del mismo punto 699 del Diario: "Ese día están abiertas están abiertas las entrañas de Mi Misericordia... El alma que se confiese y reciba la Sagrada Comunión, obtendrá el perdón total de las culpas y de las penas".
Que paséis un Buen Día de la Octava de Pascua, no sin antes rezar por las necesidades del resto de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía. AMÉN.