Reflexión 28 de Diciembre

Dentro del seguimiento de la Infancia de Jesús en estos días de la NAVIDAD, nos encontramos la Fiesta de los Santos Inocentes, que celebramos hoy. 
Cierto es que todos sabemos que estos niños inocentes, llevados a la muerte por Herodes, son, sin saberlo ni pretenderlo, los primeros testigos de Cristo El Señor. 
Ya en la Iglesia Primitiva se les veneró como mártires por causa del odio a Dios hecho Hombre. 
Hoy, por múltiples razones, ninguna por Amor a Dios, ni por el Santo Temor de Dios, se masacran a infinidad de 'santos inocentes', bien por el aborto, bien por otras injusticias humanas como puede ser el hambre, la falta de agua o las múltiples enfermedades que se dan en la infancia, particularmente del Tercer Mundo. 
Es verdad que en la mayoría de estas situaciones nos encontramos sin saber qué hacer, ni para dónde mirar. Pero hoy, ante el Niño Dios sí podemos hacer algo por los 'santos inocentes' de nuestros días: 
Podemos rezar
Podemos llorar
Podemos ofrecer, no sólo oraciones, sino también sacrificios y penitencias implorando la Misericordia de Dios. 
Podemos ayudar de cualquier manera que nos sea posible, para que pare tanta barbarie. 
Hermanos de la Casa de la Madre y Guía, dediquemos el rato que podamos hoy para Adorar al Niño, y contarle las tragedias de tantos 'niños inocentes' de nuestros días, suplicándole LUZ y CORDURA para los responsables. 
Feliz Tiempo de la Navidad!!!